Esta jornada se
celebra solo en algunos países y con diferencias en la denominación, motivación
y fecha entre todos ellos. A nivel internacional existe una celebración
promovida por la ONU que recuerda a las personas mayores en general: el Día
Internacional de las Personas de Edad el 1º de octubre de cada año.
En el año 1992
las Naciones Unidas definieron los principios más importantes a favor de las
personas mayores. Estos se clasificaron en cinco temas principales:
INDEPENDENCIA, PARTICIPACIÓN, CUIDADOS, AUTORREALIZACIÓN Y DIGNIDAD.
En nuestro
país, se conmemora el Día del Adulto Mayor de hombres y mujeres cada 26 de
agosto, es un día conmemorativo dedicado a las personas de la Tercera Edad (mayores
de 60 años de edad), complementando al Día de la Madre y al Día del Padre, instituido
por Decreto Supremo 1421 del 17 de diciembre de 1948, durante la presidencia de
Enrique Hertzog Garaizabal.
Lastimosamente
debemos reconocer que a lo largo y ancho de nuestro territorio hay ciudadanos
de avanzada edad que viven librados a su propia suerte, unas veces por la
ingratitud de sus propios hijos y otras veces por el
"quemeimportismo" del Estado y autoridades que suponen que los
"viejos" han dejado de ser ciudadanos y que sus derechos se han
restringido a su mínima expresión.
Lo menos que
se puede hacer y decir por ellos, es reconocer las inconmensurables lecciones
que hemos recibido las generaciones jóvenes y lo debemos la gratitud, el afecto
y el respeto a quienes que hoy siendo padres abuelos son vigías y orientadores
de sus descendientes.
Hoy por ti, mañana por mí, solo son palabras que van al viento cuando los adultos mayores merecen no simples adjetivos de ponderación, sino hacer que las leyes que los protejan no sea simplemente un "saludo a la bandera".
Existe un ordenamiento jurídico que les reconoce ciertos privilegios que deben ser socializados estas leyes que competen a las autoridades, instituciones y entidades cívicas de manera que "moros y cristianos", sepamos de una vez por todas que los adultos mayores no son ni serán una carga para la sociedad como suelen manifestar los ignorantes, las siguientes leyes deben ser de conocimiento y aplicación:
Ley 1674 contra la violencia en la Familia y
Doméstica, que protege a las personas adultas mayores de todo tipo de violencia física y psicológica que puedan sufrir al interior de la familia.
Ley 073 de Deslinde Jurisdiccional, referidas a despojos de propiedad es muy común en el campo, a los
adultos mayores les quitan sus terrenos porque ya son muy viejitos y los hijos
se quieren apropiar de eso y los desconocen, o si no también la comunidad los
juzgan cuando ya no pueden cumplir sus labores, les dicen ‘tienes que sembrar,
tienes que cosechar’, y si dicen que ya no pueden entonces les quitan sus
tierras.
Ley 1886 de Derechos y Privilegios, indica que las personas mayores de 60 años
tienen el derecho a ser atendidas con preferencia sin realizar filas en
ventanillas de cualquier oficina del Estado o instituciones privadas. También
deben recibir el descuento del 20 por ciento en el consumo del agua, luz,
impuesto de inmuebles, pasajes del transporte aéreo, ferroviario, fluvial y
terrestre a nivel local, interprovincial e interdepartamental.
Ley 3323 del Seguro de Salud para las Personas Adultas Mayores; (SSPAM) señala que quienes no estén
afiliados a un seguro de salud tienen derecho a atención médica gratuita en
todos los centros médicos dependientes del municipio. La debilidad en el
servicio de la salud está en la calidad de la atención y la calidez de atención.
Ley 369 de las Personas Adultas Mayores, esta Ley aprobada el 1 de mayo de 2013, señala que garantiza el
desarrollo integral de las personas mayores sin discriminación y violencia;
trato preferente; acceso a la vivienda; a la alimentación; a la incorporación
en el desarrollo económico y productivo del país; al reconocimiento de sus
conocimientos y a la seguridad social integral.
Ley 3791 de la Renta Universal de Vejez (Renta Dignidad) otorga una pensión vitalicia y universal a todas las
personas mayores de 60 años, que tengan o no jubilación.
Hay todavía mucho que aprender de la experiencia de nuestros mayores, no hemos
olvidado las enseñanzas de nuestros forjadores de la esperanza: Pastor Justino
Quispe, Gregorio Choque, Ignacio Gutiérrez, Bernabé Cahuaya, Benigno Yapu,
Remigio Gutiérrez, Fernando Choque, Pedro Choque y otros que hoy nos guían desde la eternidad.
Para todos
los adultos mayores un abrazo profundo y lleno de agradecimiento, depositarios
de nuestros saberes ancestrales, mil felicidades en su día, recordándoles que
no están solos para que vivan con dignidad y el respeto de todos que por el
momento aún estamos jóvenes.
“Es importante
almacenar buenos recuerdos para que al recurrir a nuestra memoria ésta sea
agradable, sabia, llena de esperanza y plenitud hacia las generaciones
venideras”.